O como montarse una erasmus en Francia

sábado, 26 de julio de 2008

Mi piso y yo


Bueno, pues después de arduas negociaciones vía e-mail por fin he encontrado una habitación en un piso antiguo en todo el centro de Toulouse. Sólo he visto un puñado de fotos, me siento como los padres que ven la ecografía del niño. La verdad es que tiene pinta de ser pequeño, aunque como dicen en un capítulo de los Simpsons será más bien "acogedor".
El caso es que lo voy a compartir con tres chicas francesas Marjorie, Sophie y Ariadna. Las tres saben hablar algo de castellano, así que no voy a pasarlo extremadamente mal con el tema del idioma. Y claro, en cuanto dices que vas a compartir el piso con tres chicas todo el mundo dice lo mismo, "qué cabrón". Aunque también puede ser un arma de doble filo, las mujeres son ese mundo tan raro que cohabita con nosotros... De momento solo las conozco del facebook, pero la verdad es que parecen normales, si es que eso es posible adivinarlo viendo un par de fotos. Aunque la verdad no están muy cuerdas si me han elegido a mí como compañero de piso, jaja.
Bueno, como lo único que puedo hacer de aquí a un mes es especular, me centraré en lo que viene hoy. Carlos Sastre puede ganar su primer Tour de France (lo que molaría ir a Francia con tres tours seguidos ganados por un español). Sin embargo lo más importante, es el pedazo concierto de Extremoduro de esta noche. Quedamos cerca del suelo...

viernes, 11 de julio de 2008

Qué bien sabe no existir!!


Sí, ya sé que esto era un blog de la beca erasmus. Es más, tengo noticias nuevas, hoy me han contestado de francia y me he quedado sin plaza en residencia, así que me tocará buscar piso y compartir. apasionante aventura esta.
Sin embargo lo que más (y únicamente) me preocupa hoy es la desaparción de Sergio Algora. Seguramente a nadie (o casi nadie) le suene de nada este nombre, ni el nombre que utilizaba en la batalla del día a día. Él era el niño gusano, que se transformaba en mariposa cada vez que componía, escribía o se tomaba un gin-tonic de vaso ancho al otro lado de la barra de su bar en Zaragoza. Es uno de esos grupos que yo descubrí cuando ya se habían separado, pero recuerdo perfectamente lo que sentí al escuchar por primera vez una de sus canciones. Es más, recuerdo cual fue la primera canción que escuché, "Caliño" de su "efecto lupa". Supongo que sentirían lo mismo los exploradores cuando exploraron los grandes ríos africanos. Estaba entrando en un undo del que nunca he vuelto a salir, la música indie española de los 90. Letras surrealistas superficialmente pero profundas si miras la vida desde el punto de vista de este maño. La vida es jodida, pero siempre tiene su punto de humor.
Gracias sergio. Ahora feliz, feliz.